By BELKIS CUZA MALE
Especial/El Nuevo Herald
Armando Alvarez Bravo seguirá siendo para mí el poeta de El azoro, el joven de hace cuatro décadas y que ya dominaba a la perfección el inglés. Entonces como ahora, su voz firme y segura hacía que las palabras resonaran doble, como en un eco, salido no sé de dónde. Eran los años en que ser un poeta católico y proclamarlo se veía casi como una provocación, y aquel silencio que se hacía en torno suyo le daba aire de personaje extraño. En medio de la jungla que pernoctaba en la casona habanera de 17 y H --donde estaba y está ubicada la Unión de Escritores y Artistas Cubanos--, compartimos años de labor como redactores de La Gaceta de Cuba. ¡Qué tiempos aquellos, en que a pesar de los pesares, intentábamos sonreir, mientras en el jardín crecían silenciosos el marpacífico y la palma del caminante, mientras a nuestro alrededor las sombras parecían instalarse en los pasillos de la antigua casona del banquero Gelats!
Tras la publicación de su Orbita de Lezama Lima en 1966, no quedaba dudas de que la suerte estaba echada: el poeta, ensayista y traductor (todavía no conocía su talento de cuentista), se definía aún más, ahora, como gran ensayista y antologador. Hoy, al cabo de tantísimos años, su Orbita no ha podido ser superada, no obstante la posterior ``popularidad'' del autor de Paradiso ha dado motivo a innumerables estudios y textos sobre Lezama.
Reposado y lleno de vivencias personales, con una abundante obra literaria y de crítica (arte y literatura), y una familia que no ha dejado de ser el centro de su mundo, Alvarez Bravo sigue deleitando a sus lectores con nuevos títulos. El más reciente, Cuaderno de campo (Ediciones Universal, de Miami), debe leerse, según él, como un milagro, poque la ``poesía es esencialmente un milagro''. Y qué maravilla de milagro. Si alguien ha olvidado el rumbo, le recomiendo que vuelva a tomarlo, y no deje de leer al poeta Armando Alvarez Bravo, habanero de pura cepa.
Por lo regular los niños juegan a la pelota y no leen poesía, por eso indago qué transformación tuvo que sufrir su espíritu para que se inclinará por la poesía. ¿Qué te llevó --le pregunto--, a ser escritor? Bueno, comencemos por el principio... contínue leyendo la entrevista en http://www.lacasaazulcubana.blogspot.com/
Nota importante: La foto que ven aquí de los poetas Armando Alvarez Bravo y Heberto Padilla aparece en forma vertical a pesar de que originalmente no está así y la he borrado y he vuelto a bajarla aquí más de diez veces. El resultado es siempre el mismo. ¿Debo atribuirlo a alguna razón esotérica? ¿Quizás el espíritu de Heberto? Lo dejó a vuestra consideración. De todos modos, es una foto ya histórica, tomada en Madrid, en julio de 1982, durante el Congreso Mundial de Poetas al que asistimos Heberto y yo.
4 comments:
Sra. Belkis gracias por esta notoa y la foto, no intentaré apaisarla, solo la he copiado para mi archivo, con su amable permiso, debido a lo publico de las figuras. un saludo afectuoso, Dios la bendiga, angel
Querida Belkis, una bellísima entrevista, como todas las que haces. Gustavo Valdés me trajo la revista LLM impresa, maravillosa, preciosa. Gracias.
Perdón, tuve que borrarme yo misma, jaja, porque había una fea errata. He aquí lo que dije, ya mejor:
Le agradezco, amigo Collado, su amable comentario. Puede usted tomar todas las fotos que desee de aquí. Y gracias por visitarme. Qué se repita.
Zoé, ha sido un placer entrevistar a Armando, a quien conozco de toda la vida y con quien he trabajado durante años. Lo mismo, cuando te entrevisté a ti. Gracias, por escribir un comentario tan elogioso, querida amiga.
Bendiciones para los dos.
Muchas bendiciones para los dos.
Post a Comment